Descubre tu poder oculto: ¿Qué energía predomina en ti?

En cada persona se despliegan cuatro energías que guían y moldean nuestra personalidad y destino: agua,fuego, tierra y aire.

Todas tenemos un poquito de cada una de las cuatro energías astrológicas, pero siempre hay una que destaca más y tiene un impacto importante en cómo nos relacionamos con el mundo y cómo vivimos la maternidad.

Descubrir cuál es nuestra energía principal nos ayuda a entender mejor nuestros instintos como madres, nuestras fortalezas y también los desafíos que enfrentamos.

Comencemos con el agua

Este elemento simboliza nuestras emociones más profundas y nuestra sensibilidad. Las personas con una energía dominante de agua suelen ser muy intuitivas y conectan fácilmente con los demás.

En la maternidad, estas madres son cariñosas, comprensivas y están siempre dispuestas a brindar apoyo y afecto a sus hijos.

El fuego

Representa la pasión y la energía. Aquellos con una energía dominante de fuego son apasionados, enérgicos y llenos de entusiasmo. En la maternidad, estas madres son decididas, valientes y motivadoras para sus hijos, siempre animándolos a perseguir sus sueños y metas.

El aire

Es un elemento ligero y enérgico que representa nuestra mente y nuestra capacidad de comunicación. Las personas con una energía dominante de aire son ingeniosas, curiosas y tienen una mente ágil. En la maternidad, estas madres son creativas y comunicativas, capaces de contar historias maravillosas y fomentar la imaginación de sus hijos.

La tierra

Simboliza la estabilidad y la practicidad. Aquellos con una energía dominante de tierra son realistas, trabajadores y cuidadores. En la maternidad, estas madres son sólidas como una roca, brindando estabilidad y seguridad a sus hijos y enseñándoles valores fundamentales.

Cada una de estas energías es una parte valiosa de nuestra personalidad y contribuye a nuestra forma única de ser madres.

Al reconocer y abrazar nuestras características distintivas, podemos ser la mejor versión de nosotras mismas en este hermoso y desafiante viaje de la maternidad. ¿Te apetece ser parte?